Mexicali, Baja California.- De la manera más intempestiva, turbulenta y fatídica, el signo positivo que distinguiera al asilo de ancianos "Hermoso Atardecer", ubicado en una apacible zona en las inmediaciones del ejido Querétaro, en el valle de Mexicali, se convirtió en negativo al registrarse un "horrible amanecer" .
Apenas se avizoraba el nuevo amanecer cuando por alguna causa que hasta ayer no era dilucidada fehacientemente, desde una estructura maderable, junto al cerco ubicado en el lado oeste del complejo de atención a los ancianos, algo detonó un incendio cuya propagación fue rápida e intensamente abrasadora.
El asilo, que desde hacía diez años estaba funcionando allí bajo la administración de la Sociedad Cultural Impulsora de Bienestar Social A. C., con la presidencia de Ramón Murillo y la vicepresidencia de Lourdes Sánchez, de pronto apareció inerme ante las chispeantes llamas que hacían crepitar láminas, madera y cualquier otro material con el que en su oportunidad -y, ante la falta de recursos, de manera improvisada-se había logrado la construcción.
Apenas pasaba de las 4 de la madrugada.
Aunque algunos "abuelitos" -como solían llamarles los directivos del local a sus huéspedes-despiertan muy temprano, lamentablemente a esas horas la mayoría de ellos se encontraban dormidos. Los pocos despiertos dieron la voz de alerta y despertaron a los otros. Un vecino -a quien el director general del Hospital General, doctor Caleb Cienfuegos Rascón, identificase como Luis Venegas Maderas, de 40 años-preocupado por lo que estaba sucediendo llegó hasta el lugar y fue el primero en participar en las maniobras de rescate.
El acontecimiento no dejó dormir más ayer a ningún residente del ejido y muchos se ofrecieron en forma voluntaria a ayudar.
El heroico Venegas sufrió algunas heridas superficiales y se le internó posteriormente en el Hospital General para ser atendido además por intoxicación de monóxido de carbono (humo) y probables lesiones de su sistema respiratorio.
El mismo director del Hospital General informó que al nosocomio habían ingresado, además de Venegas, un señor que dijo llamarse Mario Vásquez, de 70 años, quien presentaba quemaduras leves, probables lesiones en el sistema respiratorio y aparente intoxicación por humo.
Habló también de una persona de aproximadamente 60 años, con quemaduras de segundo y tercer grado en el 70% de su cuerpo, que requería y se le estaban proporcionando "soportes ventilatorio, hemodinámico y metabólico". Su estado era grave y se temía un desenlace fatal. Aunque en el momento no se dio a conocer la identidad, más tarde se supo que se trataba de don Ramón Pavón.
Otro de los pacientes se refiere a una persona de aproximadamente 80 años llamado Manuel "N".
Finalmente el doctor Cienfuegos dijo que otro lesionado fue internado en el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Indignado
En el Hospital General el director de éste, el doctor Cienfuegos, dijo que ninguno de los lesionados estuvo dispuesto a ser objeto de entrevistas por parte de los medios.
En las afueras, sin embargo, encontramos al joven Edgar Ramón Pavón Bórquez, sumamente indignado y dolido por las circunstancias en las que se encuentra su padre, Ramón Pavón, el único herido en peligro de morir que él vio directamente en el quirófano.
"Estoy bastante impresionado; mi padre está entre la vida y la muerte; está muy grave y no sé si se encuentra consciente o no, pero la verdad es que hablé con él y no me contestó", dijo.
Recordó que a muy temprana hora a una hermana o hermano de él le habló Lourdes -"cuyo apellido no recuerdo"-para comunicarle lo que estaba sucediendo.
"Es lamentable; nos cobran 1 mil 375 pesos para cuidarlo y para cuidarlo bien. Aparte siempre nos están pidiendo que pañales, que alimentos, que ropa", agregó el dolido hijo, quien señaló que tanto él como sus hermanos decidieron internar a su padre en la casa de asistencia a personas de adultos mayores porque, debido a su trabajo, ellos no tenían tiempo de atenderlo adecuadamente.
Muy cerca una señora de unos 65 años comentaba respecto a las víctimas de este lamentable acontecimiento:
"¡Pobrecitos!" Por eso no quiero que me metan a un asilo. Lorenzo, mi hijo, ya me advirtió -dijo en tono de buen humor-que me va a meter al asilo y yo le contesté: Para eso ocupas dinero y no creo que lo tengas".
Múltiples entrevistas
Aunque el alcalde Jaime Rafael Díaz Ochoa tenía agendada para ayer a las 09:30 horas la inauguración de una obra pública en la colonia Pueblo Nuevo, este acto fue suspendido porque decidió trasladarse muy temprano hasta el ejido Querétaro, para supervisar personalmente las maniobras que se llevaban a cabo por parte de los bomberos bajo la dirección de Fernando Rivera Valdez.
Hasta el lugar llegaron las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado. La zona ya había sido acordonada por elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, por lo que llevaron a cabo la "fe de los cadáveres" , la descripción del área y cualesquiera otro elemento que sirva para el inicio de un "expediente único de caso", persiguiendo la comisión de los delitos que resulten y en contra de quien o quienes resulten responsables.
Mientras tanto en el lugar de los hechos el director de Comunicación Social del XXI Ayuntamiento, Alejandro Contreras y en la oficina de éste, en la ciudad, la jefa de Información, Fernanda Montijo, atendía las múltiples solicitudes de todo tipo de medios para enlaces con el Alcalde.
Díaz Ochoa, entrevistado en un salón ejidal en el que se concentró a los supervivientes, lamentó los acontecimientos y dijo que el local contaba con cámaras de seguridad que seguramente incidirán en el esclarecimiento de los hechos.
Estableció que los directivos del establecimiento presumían de un incendio inducido, aunque aclaró que esto quedará definido al concluirse las investigaciones; dio datos al momento sobre los números de muertos y heridos y reconoció que se necesitaban más y mejores acciones en beneficio de los adultos mayores.
Hasta el lugar llegaron primero el secretario general de Gobierno, Francisco Rueda Gómez y luego el gobernador Francisco Vega de Lamadrid.
También desde muy temprano estaba al pendiente y operando algunas de las instrucciones superiores el secretario del Ayuntamiento, Francisco Amador Iribe Paniagua.
Las diversas autoridades tuvieron una reunión en la parte posterior del inmueble afectado y cuando el jefe del Ejecutivo estatal se retiraba de prisa para acudir al asilo en el que serían protegidos los sobrevivientes, fue urgido violentamente por los familiares de éste para que los atendiera, lo cual hizo bajándose de la unidad móvil en la que viajaba.
Tanto allí como a través de las redes y de su servicio de Comunicación Social, pronunció sus condolencias:
"Lo ocurrido es un hecho que enluta a Mexicali y a Baja California", dijo, señalando que giró instrucciones para que las autoridades estatales se abocaran a la atención de la tragedia de manera coordinada con las autoridades del XXI Ayuntamiento de Mexicali, quienes bajo la dirección del alcalde Díaz Ochoa atendieron la emergencia en primera instancia.
"He girado instrucciones para que tanto la Procuraduría General de Justicia del Estado, como las Secretarías: General de Gobierno, de Desarrollo Social, de Salud y todas las instancias que correspondan, canalicen todos los esfuerzos necesarios para atender la situación de los afectados y sus familias".
Mensaje de EPN
Por su parte, el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, se sumó a través de mensajes en redes sociales:
"Mis más sentidas condolencias a los familiares de los adultos que perdieron la vida en el trágico incendio ocurrido en Mexicali.
"Les deseo pronta recuperación a quienes resultaron lesionados en estos lamentables hechos.
"El Gobierno de la República respaldará al Gobierno del Estado en las investigaciones correspondientes".
Más tarde, tanto él como el Alcalde, así como los titulares de todas las dependencias municipales, estatales e incluso federales involucradas en el tema de alguna u otra manera, se reunieron privadamente en un salón de la Secretaría de Fomento Agropecuario, en el ejido Sinaloa.
Los directivos del lugar expresaron:
"Nuestro corazón está roto y en luto por la terrible tragedia que aconteció hoy en la madrugada en el asilo del ejido Querétaro. Pedimos a Dios por la salud de los abuelitos y abuelitas que están siendo tratados en el Hospital General".
Por su parte, Humberto Cota, quien había sido administrador del lugar, comentó que hace meses se retiró y reveló que algunas secciones del inmueble fueron construidas con techos de lámina y de madera, debido a las carencias económicas.
Reflexión
Y finalmente, la regidora Alicia Martínez, en su calidad de coordinadora de los regidores priístas en el cabildo del XXI Ayuntamiento, reconoció que "podemos calificar estos hechos como una tragedia vivida por los adultos mayores...".
Consideró que "la falta de políticas públicas reales para el apoyo de nuestros adultos mayores, el descuido y abandono de los hijos, así como la falta de apoyo gubernamental, son unas de las causas de esta tragedia".
"Esta tragedia no debe quedar impune; se debe sancionar a los responsables, así como nos obliga a que dentro de nuestro propio ámbito destinemos más recursos, apoyos y programas para favorecer a este sector social, tan desprotegido".